Port Olímpic
Situado en frente al barrio de la Vila Olímpica, y construído en 1990 en paralelo a la reforma de esta zona de Barcelona, el puerto fue proyectado por los arquitectos Oriol Bohigas, Josep Martorell, David Mackay y Albert Puigdomènech. Era necesario dotar a la ciudad de un puerto deportivo que estuviera a la altura y que fuera la sede de las competiciones de vela de los Juegos Olímpicos de 1992. Equipado con 756 amarres para embarcaciones, el acceso de entrada al puerto es visible desde cualquier punto de Barcelona.
Los dos rascacielos que se levantan a cada lado son la torre Mapfre y el Hotel Arts, al pie del cuál encontramos una espectacular escultura dorada con forma de pescado, obra de Frank Gehry, y muy cerca el Gran Casino de Barcelona. También los amantes de los deportes náuticos tienen aquí la posibilidad de practicar la vela u otras modalidades. Y en verano, a ambos lados, podremos disfrutar de un baño de sol o de un chapuzón refrescante en una de las playas que rodean este puerto: la del Somorrostro y la de la Nova Icària.
Desde 2020, el Port Olímpic trabaja para convertirse en un espacio comprometido con la ciudadanía. La transformación pretende poner el foco en la economía marítima, náutica y gastronomía como principal motor de la actividad económica y social de la ciudad.