Torre de Comunicaciones de Montjuïc
La Torre de Comunicaciones de Montjuïc, ubicada en el recinto del Anillo Olímpico, fue completada en 1992 por el arquitecto Santiago Calatrava. Se trata de una torre de radiodifusión de 136 metros de altura, que opta por una expresión escultórica, alejada de las estructuras habituales construidas con este fin. La singular forma se inspira en la figura de un atleta de la Grecia clásica y se expresa en un fuste inclinado de hormigón recubierto de placas metálicas blancas y apoyado solo en tres puntos. En la parte alta el pilar se abre en dos brazos para soportar un elemento semicircular y otro vertical que parece flotar en el aire. El fuste está alineado con el solsticio de verano en Barcelona, y su inclinación permite que la torre funciona también como reloj solar. La plataforma cilíndrica de soporte conecta con la torre mediante una fuente en forma de concha recubierta con trencadís blanco, referencia del arquitecto Calatrava al legado de Antoni Gaudí. En la parte posterior e inferior del cilindro aparece un arco cerrado por una reja metálica. Se trata de una ingeniosa puerta hidráulica, que al accionarse se dobla sobre sí misma creando un sugerente efecto, similar al empleado por el arquitecto en otros